¿Una "partícula divina"?
by carlo at/on 20:09
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Desde septiembre de 2008 nos vienen bombardeando con mucha información acerca del, antes desconocido, Bosón de Higgs y de todo lo que rodea a ésta partícula fundamental en la aparición de la masa en el universo en el que vivimos. Precisamente en un programa de televisión que veía antes de dormir hace unos días, se retomaba éste tema a raíz de una película, basada en el libro de un polémico escritor, que se estrenaría el 15 de mayo (o sea hoy) en la que si bien no se muestra precisamente éste tema, si lo hace de las instalaciones en la que se intenta producirla. Se trata del CERN, y del más famoso aún LHC (Gran Colisionador de Hadrones, en cristiano) que se encuentra en la frontera franco-suiza y que mide nada más que 27 km de circunferencia (como para hacer parte de una etapa del Tour de Francia) y que aunque tiene varios objetivos, tal vez el que más morbo despierta es hallar el Bosón de Higgs o "Partícula de Dios".
El Bosón de Higgs se encuentra predicho en el modelo estándar de la física de partículas y fue teorizado por un grupo de físicos en 1964, entre ellos Peter Higgs, pero no pudo ser hallado aún, ni experimentalmente ni naturalmente, porque se supone que solo existió en el principio del universo (o sea el Big Bang) y que es el responsable de la aparición de la masa de otras partículas que ahora componen toda la materia existente. El escritor Leon Ledderman le dio el nombre de "partícula de Dios", y que aunque su obra no sea científica, solo el calificativo ya creó cierta polémica, que fue debatida en el programa ya mencionado. Llevaron a un sacerdote de la Iglesia Católica y a un profesor catedrático del CSIC: el segundo explicó todo lo estrictamente científico y sus consecuencias, mientras el sacerdote se dedicó a afirmar que solo sería una parte de la creación de Dios (nada nuevo), luego el debate se hizo soso y apagué el televisor.
Durante unos minutos me detuve a pensar y analizar las consecuencias que tendría la confirmación de la existencia del Bosón, aunque algunos científicos como Stephen Hawking ya apostaron su inexistencia. Por una parte sería un éxito científico porque ayudaría a comprender cómo se formó el universo y su comportamiento actual, por otra parte la religión se vería algo afectada, porque solo por ser la "partícula de Dios" mucha gente tendería a identificar a Dios (ya sea el cristiano, islam o hasta el Monstruo del Espagueti Volador o Chuck Norris) con una partícula elemental. Particularmente diría que el descubrimiento de la existencia del Bosón de Higgs serviría para comprender mejor de dónde venimos y cómo se formo la materia, pero no se tendría que caer en la idea de que, por el simple hecho de que hayamos encontrado la "partícula divina", hayamos encontrado a Dios porque hay cosas que aún no comprendemos y que tal vez nunca podremos probar científicamente como la "singularidad" del Big Bang que dio origen a todo, pero al menos podemos teorizarlos y saciar de alguna forma nuestra incansable curiosidad humana.
El Bosón de Higgs se encuentra predicho en el modelo estándar de la física de partículas y fue teorizado por un grupo de físicos en 1964, entre ellos Peter Higgs, pero no pudo ser hallado aún, ni experimentalmente ni naturalmente, porque se supone que solo existió en el principio del universo (o sea el Big Bang) y que es el responsable de la aparición de la masa de otras partículas que ahora componen toda la materia existente. El escritor Leon Ledderman le dio el nombre de "partícula de Dios", y que aunque su obra no sea científica, solo el calificativo ya creó cierta polémica, que fue debatida en el programa ya mencionado. Llevaron a un sacerdote de la Iglesia Católica y a un profesor catedrático del CSIC: el segundo explicó todo lo estrictamente científico y sus consecuencias, mientras el sacerdote se dedicó a afirmar que solo sería una parte de la creación de Dios (nada nuevo), luego el debate se hizo soso y apagué el televisor.
Durante unos minutos me detuve a pensar y analizar las consecuencias que tendría la confirmación de la existencia del Bosón, aunque algunos científicos como Stephen Hawking ya apostaron su inexistencia. Por una parte sería un éxito científico porque ayudaría a comprender cómo se formó el universo y su comportamiento actual, por otra parte la religión se vería algo afectada, porque solo por ser la "partícula de Dios" mucha gente tendería a identificar a Dios (ya sea el cristiano, islam o hasta el Monstruo del Espagueti Volador o Chuck Norris) con una partícula elemental. Particularmente diría que el descubrimiento de la existencia del Bosón de Higgs serviría para comprender mejor de dónde venimos y cómo se formo la materia, pero no se tendría que caer en la idea de que, por el simple hecho de que hayamos encontrado la "partícula divina", hayamos encontrado a Dios porque hay cosas que aún no comprendemos y que tal vez nunca podremos probar científicamente como la "singularidad" del Big Bang que dio origen a todo, pero al menos podemos teorizarlos y saciar de alguna forma nuestra incansable curiosidad humana.
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